EL SOCORRISMO NO
DEBERÍA EXISTIR
El socorrismo no debería existir,
total ¿para qué? Un gasto innecesario tener a gente mirando para el mar. Esta
es la evolución del pensamiento que hacia el socorrismo muchos dirigentes
tienen, pero esto no es baladí, es consecuencia de la evolución y
profesionalidad de este campo, pero ¿cómo algo tan contradictorio puede estar
sucediendo?
Hace años era fácil cargarse la
imagen del socorrista, recurriendo al tópico de vigilante de la playa o al tema
voluntariado con atribuciones profesionales o a los que usaban este trabajo
para ligar. Eso ya está superado. Es cierto que sigue habiendo socorristas “del
tópico” pero cada vez son los menos y sus propios compañeros ya no ríen sus
gracias (o desgracias), es más, a la mayoría les cabrea. Esto me deja tranquilo
porque irresponsables hay en todas las áreas, pero si hiciésemos una
comparativa, creo que la política gana por goleada.
Retomando el tema, ahora que
parece que estamos empezando a remontar de la crisis, a los municipios se les
ha dado por recortar en socorrismo, pero los argumentos son cada vez mas pobres.
El otro día en un municipio del Barbanza
gobernado por Mareas se le retiraba la Bandera Azul por falta de socorristas,
por supuesto acusaron de esto al tema político, en el otro lado del Barbanza también retiran
en otro municipio gobernado por el PP la Bandera Azul, por el mismo motivo, no
cubren el servicio de vigilancia adecuadamente. Éstos dicen que es intolerable
y que devuelvan la Bandera, o lo que es lo mismo, cuando los pájaros se tiraron
a las escopetas, esto me recuerda a la frase del profesor Luis Casais “cuando aparecen las escusas,
desaparecen los errores” y claro está, a muchos se les olvida que en este
país más de 400 personas mueren ahogadas cada año, pero saben dónde apenas hay
víctimas, pues sí, dónde están esos chicos vestidos de amarillo, naranja o
blanco con una cruz roja, porque su trabajo también es informar, es prevenir,
es asesorar y por último, rescatar.
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/barbanza/2015/07/19/arenal-sonense-caveiro-pierde-bandera-azul/0003_201507B19C5994.htm
El tema de la Bandera Azul, es
ampliamente criticado por aquellos que no cumplen los criterios y que en el
fondo les gustaría tenerla. He leído hace poco una opinión de una periodista,
que como opinión no tiene más valor que la falta de documentación o la
desinformación gratuita.
Retomando nuestro tema muchos
justifican la no inversión porque “nunca hacen nada”, o lo que es lo mismo,
“tengamos un ejército para estar siempre en guerra” ¿Usted viviría en un
municipio sin médico?, vale, pues entonces, ¿por qué va a una playa sin
socorristas, porque nunca le va a pasar nada? es usted el vidente Sandro Rey?
Esperemos que adivine más y mejor. El riesgo de morir por ahogamiento en base
al tiempo de exposición, es 200 veces mayor que por ejemplo el riesgo de morir
por accidente de tráfico, y la cantidad de años potenciales de vida (AVADs)
perdidos por ahogamiento son superiores a la mayoría de los incidentes fuera
del agua.
Las cabezas cuadradas tienen
ahora un problema, cuando ya no hay argumentos que sustenten la no presencia de
socorristas, sólo te queda pensar “¿para qué coño habrán inventado esto del
socorrismo?” pero ya es un argumento pueril, sin valor y totalmente fuera de
onda, mientras tanto municipios que antes pagaban 1000€ por trabajar en las
playas ahora están en 600€ y 800€, una vergüenza para una profesión que no solo
vela por la vida, sino que por desgracia a veces también se la juega.
Yo he tenido suerte, he trabajado
de socorrista muchos años y ahora soy formador, investigador y profesor, pero
no me olvido de mis orígenes, porque muchos hemos trabajado para dignificar
esta profesión, y ahora cuando la gente vea a un socorrista, que sepa que es un
tipo preparado, comprometido y que está para ayudar. Ojalá los que toman las
decisiones sobre nuestra seguridad pueden decir lo mismo.
Roberto Barcala Furelos
Profesor de Universidad pero
antes de todo eso ciudadano y socorrista.