El calor te puede matar. Las lesiones
producidas por el calor, son un conjunto de alteraciones, locales
o generales,
ocasionadas por las temperaturas elevadas.
El ser humano tiene
una temperatura corporal que oscila entre los 36.7ºC y los 37ºC. Esta
temperatura debe mantenerse constante para el correcto funcionamiento del
organismo. Cuando por determinadas circunstancia, aumento del metabolismo
celular o temperaturas externas muy elevadas, la temperatura corporal aumenta,
se producen una serie de trastornos. 1.
Insolación: Afecta fundamentalmente a niños, ancianos y personas
débiles. Se produce, por la acción directa y prolongada de la irradiación solar
sobre la cabeza, en condiciones de elevada temperatura y humedad ambiental.
2.
Agotamiento por calor: Sensación de cansancio extenuante, que se produce al
realizar ejercicio físico en un ambiente caluroso y húmedo.
3.
Síncope por calor: Este cuadro aparece en sujetos expuestos a elevadas
temperaturas ambientales. En estas circunstancias, el sistema
cardiocirculatorio falla produciéndose una intensa vasodilatación cutánea que
disminuye el flujo de sangre hacia el sistema nervioso central.
4.
Golpe de calor: Es un cuadro grave, que se produce por una alteración de
los mecanismos termorreguladores. Aparece exposición prolongada a altas
temperaturas y al sol, sin circulación de aire, sobre todo en sujetos que están
realizando un esfuerzo físico. Afecta fundamentalmente a niños, ancianos,
alcohólicos y obesos.
Tipos de lesiones.
Insolación. En muchas ocasiones
no se producen todos los síntomas juntos. Es necesario sospechar que un sujeto
presenta un cuadro de insolación cuando aparecen algunos de estos síntomas,
junto con el antecedente de la exposición al sol:
·
Fiebre
y gran postración (dolor de cabeza, nauseas y debilidad).
·
Piel
caliente y seca, no hay sudoración.
·
Pulso
débil y acelerado.
·
Respiración
rápida y superficial.
·
Vértigo,
calambres musculares.
·
Convulsión,
delirio.
·
Alteraciones
de los órganos de los sentidos.
·
Pérdida
de conocimiento, si persisten las condiciones desfavorables.
Agotamiento por Calor: cuando la situación anterior se mantiene mucho tiempo
puede aparecer este cuadro que se caracteriza por:
·
Sudoración
importante que puede llevar a la deshidratación
·
Palidez
y sensación de frío
·
Pulso
rápido y débil.
·
Hipotensión.
·
Temperatura
corporal normal o un poco elevada.
·
Pueden
aparecer calambres musculares o convulsiones.
Síncope por Calor: es la pérdida brusca de la conciencia que aparece como
consecuencia de exposición prolongada al sol y que presenta además de los
síntomas de agotamiento anteriores, una pérdida de consciencia de duración
variable.
Golpe de Calor: suele aparecer cuando una persona no intercambia bien su
temperatura con el exterior al realizar algún tipo de actividad intensa
(correr, trabajar duro al sol, etc.) y se encuentra muy abrigada (con ropa
plástica que impide la sudoración). Todo ello conlleva un aumento de la
temperatura corporal brusca, que puede producir síncope acompañado además de:
·
Piel
de color rojizo o morado, seca y caliente.
·
Temperatura
corporal elevada, superior a 40ºC.
·
Aumento
de la frecuencia cardiaca y respiratoria.
·
Flacidez
muscular y disminución de los reflejos.
·
Confusión
mental.
·
Convulsiones.
·
Estupor
y coma.
¿QUÉ PODEMOS HACER? - INTERVENCIÓN
Insolación:
- Llevar
al sujeto a un lugar fresco, seco y bien ventilado.
- Poner
compresas frías en la frente.
- Si
la temperatura corporal es muy elevada, refrescar, mojando todo el cuerpo
envolviéndolo con una sábana húmeda.
- Dar
de beber agua, en pequeñas cantidades si está consciente.
Agotamiento y síncope por calor
·
Tumbar
al sujeto en un sitio fresco, ventilado y con las piernas elevadas para
prevenir el shock, como se ha comentado anteriormente.
·
Suministrar
abundantes líquidos, para prevenir la deshidratación.
·
Si
aparecen calambres musculares administrar bebidas con un poco de sal.
·
Mantener
las vías aéreas permeables y administrar oxígeno si es preciso.
·
Cuando
recupere la conciencia, rehidratarle.
Golpe de Calor.
El tratamiento debe
ser muy rápido, puesto que, es una auténtica urgencia médica, que puede costar
la vida del sujeto. Hay que disminuir, de forma inmediata, la temperatura
corporal:
1.
Valoración
primaria y secundaria.
2.
Tumbar
al paciente, envolviéndolo con una sábana húmeda, incluso bañándolo con agua
muy fría o con hielo.
3.
Controlar
las funciones vitales, SVB y oxígeno por mascarilla.
4.
Traslado
urgente a un hospital.
Prevención.
No exponerse
directamente a los rayos del sol durante largos periodos de tiempo, sobre todo
si la humedad ambiental es elevada y utilizar cremas solares con factores de
protección elevados.
No realizar ejercicio
intenso, en condiciones climáticas desfavorables.
No utilizar ropas que
impidan la transpiración.
Tomar abundante
líquidos ligeramente salinos.
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